El quelite ayuda a combatir la gastritis

Una investigación realizada por la Facultad de Medicina de la UNAM llegó a la conclusión de que el quelite puede ayudar en el tratamiento y la prevención de la gastritis.

La investigación, a cargo de Irma Romero Álvarez, encontró que el quelite actúa contra la bacteria Helicobacter pylori, que está asociada a la gastritis y otras enfermedades estomacales, como úlceras y en caso extremo, cáncer de estómago.

Se calcula que más de la mitad de la población mundial está afectada por la bacteria, pero de acuerdo con la investigación, este planta tradicional mexicana puede ser efectiva en la inhibición de su desarrollo, ya que neutraliza su efecto en el epitelio gástrico, evitando que siga lesionando las capas protectoras del estómago.

Cualquiera de las más de 500 especies de quelite es efectiva para inhibir el desarrollo de la H. pylori incluso mejor que antibióticos comerciales como el metronidazol (antibiótico y antiparasitario). Sin embargo, esto no significa que el consumo del quelite sustituya al uso de antibióticos; su uso debería ser más bien preventivo; ya que si bien ayuda a inhibir el desarrollo la bacteria, lo cierto es que no es una cura para la gastritis.

Los quelites son una hierba sumamente nutritiva, que aporta minerales, vitaminas, fibra y micro nutrientes; sin embargo, la investigadora señala que son a menudo subvaloradas tanto por productores, investigadores, así como por consumidores. Por lo que insta a revalorizar y seguir investigando esta y otras alternativas de plantas medicinales.

“Queríamos determinar si además de su valor nutricional, los quelites podían tener alguna propiedad en el control de enfermedades, y de esa manera darle un valor agregado y favorecer su consumo”


Parte del objetivo de este equipo de investigación es que a través del estudio de plantas medicinales se de impulso a estas alternativas que pueden resultar más efectivas, accesibles y menos tóxicas; ya que cerca del 20% de los pacientes no concluyen sus tratamientos, lo que trae complicaciones; pero con una incorporación de estos en la alimentación, se podría prevenir y lidiar mejor con las enfermedades.

Por lo pronto, la investigación sigue en curso y el siguiente paso es hacer pruebas.

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